“En la oscuridad puedo colgar en las paredes de mi mente lienzos de colores, en la soledad puedo ver quién soy bajo la piel"
Beatriz y los cuerpos celestes

domingo, 26 de febrero de 2012

18

Hoy cumplo dieciocho años. Ya no soy aquella niña que correteaba por la casa, aquella niña despreocupada que jugaba con sus muñecas en el hueco de la escalera y no entendía la complejidad de la vida. Han pasado demasiadas cosas en muy poco tiempo. Ahora sé distinguir los problemas de las tonterías, los fracasos de las pequeñas dificultades, los buenos amigos de los conocidos. Ahora soy comedida al hablar, expreso mi opinión sólo cuando creo que puede resultar útil para los demás y aprecio cada instante de forma diferente.

No bebo, ni fumo, ni me gustan las grandes fiestas ni las aglomeraciones. Disfruto más con una pequeña reunión de amigos, tranquila y apacible. Soy perfeccionista, pero menos que hace unos años. Me vuelvo loca con La Oreja de Van Gogh, las rimas de Bécquer y los artículos de Pérez- Reverte. Disfruto con el cine, las historias de amor y los momentos haciendo imbecilidades con mis amigas. Me gusta dibujar, el olor a tierra mojada y el mar de mi tierra.Valoro hasta el infinito el cariño de las personas a las que quiero, y trato de demostrarles que siempre podrán contar conmigo, pase lo que pase. Y, lo mejor de todo: no soy perfecta, y ya no aspiro a serlo. Porque todos somos como somos, animales extraños, incomprensibles muchas veces, malhumorados otras tantas, pero únicos. Tengo carácter y me duele la deslealtad y la falta de respeto a los demás, y no puedo evitarlo. Pero soy así, y a partir de ahora sólo me importará que me acepten las personas a las que realmente valoro, las que quiero que estén en mi vida.

Tengo dieciocho años, muchas experiencias a mis espaldas e infinitas ganas de aprender y comerme el mundo. Mientras mis pies están en la tierra, mi imaginación vuela y me transporta a entornos idílicos, a vivencias inolvidables, a personas que ya no están y a otras tantas que me enseñan algo nuevo cada día.

Ahora toca mirar hacia adelante.




3 comentarios:

  1. Muchas felicidades Mar. Me recuerdas mucho a mí cuando tenía tu edad, demasiado madura para ser tan joven, pero al final eso te traerá más alegrías que dolores de cabeza.

    Besos!
    Quejica

    ResponderEliminar
  2. Muahcas Felicidades Mar!! (vengo con algo de retraso) Y que decirte... Ojala muchas personas a tu edad fuesen asi, yo a los 18 era asi... despues me perdí un poco, pero volvi a recuperar el camino. Sigue creciendo como persona día a dia, pero eso sí, nunca te olvides de ser niña :)

    Un saludo!
    Marta

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias! Claro que si, hay que mantener siempre un poco de inocencia, porque el tiempo pasa demasiado rápido.

    Muchos besos

    Mar

    ResponderEliminar