“En la oscuridad puedo colgar en las paredes de mi mente lienzos de colores, en la soledad puedo ver quién soy bajo la piel"
Beatriz y los cuerpos celestes

martes, 1 de mayo de 2012

Un futuro a medio dibujar

Hi there! Ya estamos a 1 de mayo, ¡cómo pasa el tiempo! Ahora sí que empieza lo fuerte, así que habrá que ponerse las pilas de aquí a final de curso. Estoy deseando terminar.

En la última entrada hablé de mi indecisión sobre la carrera en la que me matricularía. Finalmente he decidido estudiar Estudios Ingleses (Filología Inglesa) e intentar matricularme posteriormente en Traducción e Interpretación en mi querida Granada. El tiempo dirá si el plan saldrá bien o no. Yo estoy dispuesta a intentarlo. Tengo ganas de que las cosas me vayan bien de una vez por todas después de todo lo que ha pasado en los últimos tiempos, y para ello también tendré que poner algo de mi parte. No sé, tengo la sensación de que todo puede cambiar de ahora en adelante. Ojalá que sea así, porque necesito cambios y energía como agua de mayo (¡nunca mejor dicho!).


Por cierto, me he presentado nuevamente al certamen literario del instituto. He escrito un relato de misterio, aunque no sé si tiene muchas posibilidades de ganar. Lo trágico siempre vende más que lo entretenido a secas, para qué nos vamos a engañar. De todas formas, lo que yo quería era participar sin más, pues este es mi último año en el instituto y me quería despedir en condiciones. Veremos los resultados.


A todo esto, resulta que me tengo que comprar un vestidito para la dichosa graduación del 1 de junio. A mí es que no me van nada los formalismos, pero reconozco que sí me hace un poco de ilusión el acto en sí. Han sido seis años en el IES Celia Viñas, y aunque ha habido momentos muy duros, siento que al irme dejo allí una parte de mi vida. Espero recordar los buenos momentos y dejar atrás los malos.



Ahora lo que toca es hacer el sprint final. Tengo planes para verano, pero sé que entre unas cosas y otras no haré ni la mitad, como siempre. Me gustaría buscarme algún trabajillo (cosa difícil) y hacer un poquito de ejercicio, que tanto estar pegada a la silla y al flexo no puede ser bueno. Y bueno, también lo típico: ir a la playa, salir... Aunque a quién quiero engañar, si me paso los veranos aburridísima en Almería, pasando un calor horroroso y pegada al ventilador. Tengo muchas, muchas ganas de que esto cambie, aunque como no ocurra un milagro...


En fín, el tiempo se encargará de poner las cosas en su lugar y de darme la respuesta a todas estas preguntas que me hago ahora mismo. ¡Que os vaya bien!

Mar